La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC por su sigla en inglés) emitió una multa de 619 millones de dólares –algo más de un billón de pesos colombianos– contra el banco ING por realizar miles de transacciones que permitieron enrrutar dinero hacia Estados Unidos desde Cuba, Irán, Libia, Sudán y Birmania.
La multimillonaria multa, que se dio a conocer a través de un comunicado de prensa fechado el pasado 12 de junio, es la más grande en la historia de OFAC y tuvo lugar luego de que la autoridad estadounidense comprobara que entre 2002 y 2007 el banco ING realizó más de 20 mil operaciones financieras en claras violaciones de las sanciones emitidas contra Cuba (CACR), Irán (ITR), Birmania (BSR), Sudán (SSR) y Libia (LSR).
La modalidad
Según informó OFAC, desde 1990 varios funcionarios del banco ING en Curacao realizaron pagos hacia EE.UU. desde Cuba, omitiendo la información real de sus clientes con el objetivo de evitar ser descubiertos. Esa misma práctica ocurrió en sucursales del banco en Francia, Bélgica y los Países Bajos.
Lo más grave que se detectó en este respecto fue que los directivos de ING en Francia autorizaron, cuando así fuera necesario, que entidades financieras cubanas usaran sellos falsos del banco para disfrazar de mejor manera las transacciones. Además, esta tipología permitió que clientes cubanos exportaran productos estadounidenses hacia Irán.
Lo que dicen las autoridades de EE.UU.
Adam Szubin, director de OFAC, indicó que la multa ‘‘debe servir como clara advertencia para cualquier persona que considere la posibilidad de obtener beneficios evadiendo las sanciones impuestas por los Estados Unidos’’. Szubin también destacó el trabajo realizado por agentes federales y estatales en la investigación que duró varios años.
A su turno, la secretaria de Justicia Auxiliar, Lisa Mónaco, recordó que ‘‘la multa anunciada es la más grande contra un banco en la historia en relación con una investigación sobre violaciones a las sanciones de Estados Unidos’’. Incluso agregó que esta situación ‘‘pone de relieve las implicaciones que la conducta criminal del banco ING tuvo en la seguridad nacional. Durante más de una década ING ayudó a proporcionar acceso al sistema financiero de EE.UU. a Estados patrocinadores del terrorismo, lo que les permitió mover miles de millones de dólares a través de bancos para adelantar compras y otras actividades ilícitas’’.
¿Qué sigue para el banco ING?
Cabe señalar que ING y OFAC realizaron un acuerdo para que la multa no fuera mayor. Ese convenio contempla que el banco está obligado a realizar evaluaciones permanentes a su sistema de administración de riesgo LA/FT y deberá, de igual forma, presentar un gran informe sobre sus políticas y procedimientos para garantizar que su esquema de cumplimiento funciona eficazmente.