El que lava y reza… /
No es extraño que los grandes capos del narcotráfico utilicen parte de sus fortunas en la realización de actos benéficos orientados a apoyar, en la mayoría de los casos, a la clase menos favorecida.
La aceptación social, la lealtad del pueblo, el perdón de sus pecados o simplemente el apoyo a las causas en las que creen, son las causas que mueven a estas personas a realizar actos benéficos.
Es así como Pablo Escobar Gaviria, en los años 80s realizó un sinnúmero de obras cívicas en las que se incluyen construcción de urbanizaciones en las que reubicaba a personas que vivían en basureros, construcción de canchas de futbol en barrios populares, donación de tractores y buldóceres, entre otras cosas. Estas obras devinieron en que fuera apodado el “Robin Hood Paisa”.
De acuerdo a un artículo del diario El Colombiano, Carlos Ledher fundó el “Movimiento Latino Nacional” a través del cual realizó una donación de 10 millones de pesos para los damnificados del terremoto de Popayán de 1983.
En México a finales del año pasado, varios medios de comunicación mexicanos señalaron la construcción de una capilla color naranja, ubicada en un barrio popular de Pachuca, estado de Hidalgo en México. La construcción ostenta una cruz metálica de más de 20 metros de altura, donada por Heriberto Lazcano Lazcano considerado por el Estado mexicano como el jefe de Los Zetas.
Como consecuencia de estas acciones, se ha generado un debate ético en torno de si se debe recibir o no este tipo de donaciones, aunque existan buenas intenciones de por medio, pues con estas donaciones se cierra la cadena de lavado, ya que de ellas los delincuentes obtienen frecuentemente beneficios que, aunque son intangibles, son muy valiosos, como granjearse el apoyo popular.
Fuentes:
Un Robin Hood paisa
Bienes de Carlos Ledher llevan 20 años en extinción
Iglesia reconoció y condenó las donaciones de narcos