En muchas ocasiones, la especialización única de los profesionales de las unidades de cumplimiento en temas relacionados con la prevención del LAFT hace que pasen por alto temas básicos como los sectores de la economía. InfoLAFT recuerda cuáles son, qué cifras manejan y cómo se dividen, información clave teniendo en cuenta que los clientes y los riesgos provienen de todos los sectores.
Definiciones básicas
La economía se divide en tres grandes sectores, según la teoría clásica: primario o agropecuario, secundario o industrial y terciario o de servicios. El primario, según indica la Biblioteca Virtual Luis Ángel Arango del Banco de la República, ‘‘es el sector que obtiene el producto de sus actividades directamente de la naturaleza, sin ningún proceso de transformación’’. Sus principales actividades son:
- Agricultura
- Ganadería
- Silvicultura (cuidado y explotación de bosques y cerros)
- Pesca
- Caza
El sector secundario ‘‘comprende todas las actividades económicas (…) relacionadas con la transformación industrial de los alimentos y otros tipos de bienes o mercancías, los cuales se utilizan como base para la fabricación de nuevos productos’’. Aquí cabe señalar que hay dos subdivisiones: industrial extractivo e industrial de transformación. Las actividades más destacadas son:
- Extracción de petróleo y explotación minera (extractivo)
- Envasado de legumbres y frutas (de transformación)
- Embotellamiento de bebidas (de transformación)
- Producción de abonos y materiales fertilizantes (de transformación)
- Ensamblaje de vehículos (de transformación)
- Fabricación de cemento (de transformación)
- Fabricación de electrodomésticos (de transformación)
A su turno, el sector terciario es aquel que ‘‘incluye todas aquellas actividades que no producen una mercancía en sí, pero que son necesarias para el funcionamiento de la economía’’. En este sector encontramos:
- Comercio
- Restaurantes
- Hoteles
- Transporte
- Servicios financieros
- Servicios educativos
- Comunicaciones
Cifras
El Producto Interno Bruto (PIB) es la medida de la producción de servicios y bienes de un país en un lapso determinado, que por lo general es de un año. Según cifras preliminares del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) el PIB de Colombia en 2010 fue de 548 mil 273 millones de pesos, mientras que en 2009 fue de 508 mil 532 millones y en 2008 fue de 481 mil millones de pesos.
Durante 2009, el sector financiero, de seguros, actividades inmobiliarias y servicios a las empresas (sector terciario) fue el que más aportó al PIB con un total de 96.754 millones de pesos, en segundo lugar se ubicaron las actividades de servicios sociales, comunales y personales (sector terciario) con 78.488 millones, enseguida se ubicaron las industrias manufactureras (sector secundario) con 70.443 millones y el cuarto puesto lo obtuvo el comercio (sector terciario) con 58.638 millones de pesos. A continuación se detallan las cifras del estudio de Cuentas Nacionales Anuales de Colombia, realizado por la Dirección de Síntesis y Cuentas Nacionales del DANE:
Sectores de riesgo para el GAFI
La Recomendación 22 del GAFI, establece las gestiones de debida diligencia que deben realizar las profesiones y actividades designadas no financieras. Estas actividades son las siguientes:
a) Casinos. Estas entidades deben realizar un conocimiento de su cliente cuando realicen operaciones iguales o por encima del umbral designado por cada país.
b) Agentes inmobiliarios. Deben conocer a su cliente cuando participen en transacciones de compra y venta de bienes inmuebles.
c) Comerciantes de metales y piedras preciosas. Deben realizar una debida diligencia cuando se realizan transacciones en efectivo superiores al umbral establecido en cada país.
d) Abogados, notarios, contadores y otras porfesiones jurídicas independientes. Deben conocer a su clienes cuando realicen una de las siguientes actividades:
- Compra y venta de bienes inmuebles.
- Gestión de fondos, valores y otros activos de sus clientes.
- Gestión de cuentas bancarias de sus clientes.
- Organización de aportes en la creacion de empresas.
- Creación, operación y administracion de personas juridicas, así como su compra o venta.
e) Fideicomisos y empresas prestadoras de sevicios. Deben conocer a su cliente cuando lleven a favor del mismo las siguientes actividades:
- Cuando actúen como agentes para la constitución de personas jurídicas.
- Cuando actúe como director o secretario de una compañía, como socio de una persona jurídica o en una posición similar en relación con otras personas jurídicas.
- Proveer un domicilio social para una empresa.
- Actuar como fiduciario de un fideicomiso.
- Actuar como accionista nominal por cuenta de otra persona.
El cumplimiento de estas obligaciones de debida diligencia, implica implementar procedimientos de conocimiento del cliente, establecidos en las Recomendaciones 10, 11, 12, 15, y 17.
Por otro lado, la Recomendación 23 señala que las mencionadas profesiones y actividades designadas no financieras deben cumplir con las Recomendaciones 18 a 21 teniendo en cuenta los siguientes requisitos:
a) Los abogados, notarios, contadores y otras profesiones jurídicas independientes, así como las fiduciarias y empresas prestadoras de servicios, deberían estar obligados a reportar operaciones sospechosas cuando participen en las transacciones mencionadas anteriormente.
b) Los comerciantes de metales y piedras preciosas deberían estar obligados a reportar operaciones sospechosas cuando realicen una transacción en efectivo con un cliente que supere el umbral señalado en cada país.
Conclusiones
Luego de observar las cifras, es claro que el sector terciario es el que más aporta para el Producto Interno Bruto (PIB). En la tabla se demuestra que de los nueve subsectores estudiados, seis hacen parte del mencionado sector, mientras que dos son del sector secundario y uno del primario.
Estos datos son de vital relevancia si se tiene en cuenta que a diario en las instituciones se realizan millonarias operaciones que bien pueden superar los montos aquí entregados.
Fuentes:
*http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/
