A pesar de este logro, el país centroamericano recibió una importante reducción de la calificación en la recomendación 8, que hace referencia a controles en organizaciones sin fines de lucro.
En términos generales, fueron buenos los resultados del seguimiento que el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat) le hizo al sistema nacional contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo de Honduras.
Según un informe publicado por el organismo regional, Honduras pasó a cumplir las recomendaciones 3, 10, 23, 29 y 34 de GAFI, las cuales antes cumplía parcial o mayoritariamente. Además, subió la calificación en la recomendación 17, al pasar de parcialmente cumplida a mayoritariamente cumplida.
Las recomendaciones que ahora Honduras cumple son las siguientes:
- Recomendación 3: delito de lavado de activos.
- Recomendación 10: debida diligencia del cliente.
- Recomendación 23: otras medidas de control en actividades y profesiones no financieras.
- Recomendación 29: unidades de inteligencia financiera.
- Recomendación 34: guía y retroalimentación.
De igual manera, la recomendación 17 –aquella en la que subió la nota a mayoritariamente cumplida– hace referencia a la dependencia en terceros.
Para lograr subir la nota en las seis recomendaciones, Honduras aprobó medidas como una ley contra el lavado de activos, cuyo artículo 79 estableció que la Comisión Nacional de Bancos y Seguros debe retroalimentar, por lo menos anualmente, a todos los sujetos obligados respecto a la calidad de la información que le envían.
La estrategia de Panamá para salir de la lista gris de GAFI
El país centroamericano también obligó a su UIF a publicar las tipologías de LA/FT detectadas y estableció un conjunto de requisitos de formación que deben cumplir los oficiales de cumplimiento de las empresas no financieras.
Sin embargo, el país dejó de cumplir mayoritariamente la recomendación 8 sobre controles a las organizaciones sin fines de lucro debido a que el GAFI cambió la metodología de evaluación de este estándar.
De esta forma, Honduras no pudo entregar información sobre disposiciones relativas a “la identificación de subgrupos de organizaciones sin fines de lucro que se encuentren enmarcadas en la definición de GAFI” y tampoco logró demostrar que tenía controles establecidos para evitar que dichas organizaciones fueran usadas para actividades de LA/FT.
