La Unidad de Información y Análisis Financiero (Uiaf) necesita un director o directora de nivel, ya que deberá enfrentar los retos del eventual postconflicto y la evaluación del próximo año del Fondo Monetario Internacional. Análisis.
En política se dice que la ‘gabinetología’ es el deporte nacional, ya que a muchos colombianos les gusta opinar (o especular) acerca de quiénes deberían ocupar determinados cargos cuando estos están vacantes.
En vista de que actualmente la silla de la dirección de la Uiaf está sin un titular, y en razón a que esta Unidad es una de las entidades más importantes del sistema nacional antilavado de activos y contra la financiación del terrorismo, Infolaft considera conveniente presentar un análisis que pueda ser útil para los encargados de elegir al nuevo director.
Se aclara que este es simplemente un ejercicio de análisis y que Infolaft no tiene conocimiento de las discusiones al interior del Gobierno ni ha conversado con las personas cuyo nombre se incluye en este artículo.
¿Habrá un ‘peso pesado’?
Sería adecuado que el Presidente de la República nombrara como director de la Uiaf a una persona que goce de reconocimiento y que pueda mostrar logros en otros cargos. Es decir, alguien que le aporte al cargo y no al contrario: que el cargo le aporte a su carrera.
Entre estos pesos pesados podrían estar Juan Ricardo Ortega, exdirector de la Dian y actual asesor del Banco Mundial; y Jorge Fernando Perdomo, fiscal general (e).
De Ortega se puede decir que uno de sus puntos altos es que se caracterizó por enfrentar las mafias del contrabando –tanto las internas en la Dian como las externas- y que a raíz de la emisión de la ley anticontrabando se ampliaron las facultades de la Uiaf para combatir ese delito, lo cual haría razonable su eventual nombramiento.
Por su parte, Perdomo no fue incluido en la terna de la cual se elegirá al próximo Fiscal General y por ello podría ser tenido en cuenta para la dirección de la Uiaf. Además, debido a su amplia formación como abogado tiene conocimientos detallados del tipo penal del lavado de activos y ha interactuado con la Uiaf en muchas ocasiones.
Sin embargo, también se debe mencionar que la dirección de la Uiaf es un cargo no muy apetecido debido al poco presupuesto que maneja y a la relativamente pequeña planta de asesores.
La gente del medio
Otro elemento que debería tener en cuenta el Presidente es que debido a la proximidad del postconflicto y a la evaluación del FMI sería muy aconsejable nombrar a alguien que tenga una formación amplia y técnica en materia de prevención del lavado de activos y la financiación del terrorismo.
Es decir, alguien a quien no haya que explicarle cuáles son los fundamentos de un reporte de operación sospechosa (ROS), cómo se debe manejar la información de inteligencia, cómo funciona el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), en qué consiste la Comisión de Coordinación Interinstitucional de lucha contra el Lavado de Activos (Ccicla), entre otras.
En este campo valdría la pena que se tuvieran en cuenta a oficiales de cumplimiento destacados de entidades financieras, cooperativas o empresas del sector real.
Aquí también vale la pena mencionar a Wilson Alejandro Martínez, exvicefiscal general y profesor de la Universidad del Rosario, y Daniel Fernando Jiménez, exasesor del Vicefiscal y exfuncionario de la Superintendencia Bancaria. Martínez es conferencista habitual en foros antilavado y ayudó a redactar el Código de Extinción de Dominio vigente en la actualidad, mientras que Jiménez es un experto reconocido y autor de varios libros en la materia.
Los expertos reconocidos
Es claro que la dirección de la Uiaf no puede ser ocupada por un extranjero, pero sí se pueden tener en cuenta a profesionales colombianos que previenen o han prevenido el lavado de activos desde organismos internacionales, ya que dicha formación puede aportar mucho.
Entre ellos estarían John Grajales, especialista antilavado de activos de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas de la OEA (Cicad); Jorge Galeano, actual asesor del FMI y de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc por su sigla en inglés); y Ernesto López, exsecretario general del Grupo de Acción Financiera Internacional del Caribe (Gafic).
Todos ellos poseen conocimientos técnicos muy profundos contra el lavado de activos y manejan buenas relaciones con las autoridades del ramo en el exterior.
¿Una mujer en la dirección?
Las funcionarias que actualmente luchan contra el lavado de activos desde la Fiscalía General serían una excelente opción.
Aquí se podrían mencionar a Luz Ángela Bahamón, actual directora de la Fiscalía Antinarcóticos y Lavado de Activos; Andrea Malagón, directora de la Dirección de Fiscalía para la Extinción de Dominio; y Ana Linda Solano, directora de la Policía Económica y Financiera (PEF) de la Fiscalía.
Las tres han tenido una buena gestión y han mostrado resultados, tanto en la judicialización del lavado de activos, como en la persecución y extinción del dominio de los bienes. Además, desde sus cargos saben cómo funciona la Uiaf y qué tipo de información requiere la Fiscalía.
¿Alguien de Dian o MinJusticia?
Tal y como se mencionó anteriormente, debido a que la ley anticontrabando faculta a la Uiaf a perseguir no solo el lavado de activos y la financiación del terrorismo sino también el contrabando, no sería descabellado pensar que se designe a alguien que hoy se desempeñe en la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian).
Otro funcionario que podría entrar en la baraja de candidatos sería Javier Villa, asesor del Ministerio de Justicia, quien ha tenido bajo su cargo sacar adelante muchas de las tareas del Conpes 3793 de 2013 (política pública contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo) así como de facilitar la coordinación entre instituciones para combatir esos flagelos.
Un policía, quizá
Así como la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) es dirigida actualmente por un almirante y en su momento varios policías fueron jefes del extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), el Gobierno también podría evaluar la posibilidad de designar a un policía o expolicía para darle altura y confianza al cargo.
No obstante esta es una opción remota, ya que en el mundo son muy pocos los casos en los que las UIF no son dirigidas por civiles.
¿Alguien de adentro de la Uiaf?
Una opción que no se puede descartar es la de nombrar como director a alguien que hoy trabaje al interior de la Unidad, toda vez que son personas que tienen entrenamiento, conocen el tema y tienen vínculos con los sectores reportantes, con las demás autoridades en materia de prevención del lavado de activos y con los organismos internacionales.
Aquí estarían, entre otros, el actual subdirector de Análisis Estratégico, el subdirector de Análisis de Operaciones o la actual directora encargada de la Uiaf, Carmen Maritza González, a quien si le dan tiene tiempo podría mostrar buenos resultados y ganarse la confianza de sus superiores.